Ante la muerte del Presidente Hugo Chávez
La noticia de la muerte del Presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, tiene una connotación histórica por el papel que ha jugado desde finales del siglo pasado en la política de América Latina y el Caribe y por las implicaciones que tiene para el futuro de las luchas de los trabajadores y las masas.
El llamado Socialismo del Siglo XXI se instauró sobre los procesos revolucionarios e insurreccionales de América Latina y el Caribe – como fue el Caracazo en 1989 – con el fin de ‘estabilizar’ los regímenes políticos en la región.
En el caso colombiano, Hugo Chávez mantuvo diferencias con el Gobierno de Uribe Vélez y después estableció un acuerdo con la burguesía colombiana y el Gobierno de Juan Manuel Santos para impulsar el comercio entre los dos países y para apoyar la negociación con la guerrilla colombiana que hoy llega a acuerdos en La Habana.
Para los trabajadores y los sectores populares la llamada Revolución Bolivariana no resolvió sus condiciones de explotación y opresión y por tanto deben continuar su lucha contra las burguesías de la región, muchas de ellas representadas por los llamados gobiernos alternativos – por el socialismo, recordando que la emancipación de la clase obrera sólo puede ser obra de sí misma.
A continuación, publicamos la Declaración Política de la Unidad Socialista de los Trabajadores, sección de la Liga Internacional de los Trabajadores – Cuarta Internacional en Venezuela.
Ante la muerte del Presidente Hugo Chávez
Este martes 5 de marzo de 2013, a las 4:25 p.m., falleció el Presidente de Venezuela Hugo Chávez. Sabemos del dolor y la tristeza de muchos compañeros ante esta situación. A través de mensajes de textos, llamadas u otros medios, compañeros se han dado ánimo y han llamado a “continuar la lucha”.
Es sabido que desde la Unidad Socialista de los Trabajadores, UST, hemos estado y estamos en una posición opuesta al gobierno chavista. Nunca creímos que hubiésemos estado, ni creemos que estemos en camino al socialismo. El Gobierno de Chávez surgió como consecuencia del Caracazo, se había montado en ese proceso, no para ir hacia el socialismo, sino para recuperar las instituciones burguesas.
Siempre hemos dicho que este era un gobierno tibiamente nacionalista burgués, que había dado, algunas concesiones a las masas y por eso muchos trabajadores y sectores populares lo consideraban como suyo. Tampoco creemos en los discursos de los militares sobre la independencia nacional y la ‘patria socialista’, pronunciados justamente por quienes no han sido ni siquiera investigados por el genocidio del 27 de febrero de 1989.
Pero tenemos que decir que, lejos de constituir un gobierno para lograr la independencia nacional del imperialismo y más allá de los discursos, nuestro país sigue bajo los dictados de las empresas multinacionales, la banca extranjera y privada, con una economía dependiente de la renta petrolera y con un 40% de ‘empresas mixtas’ (yanquis, rusas, francesas, españolas, italianas, chinas, etc.) que nada tienen que ver con nuestra ‘soberanía nacional’.
Las últimas medidas económicas tomadas por el oficialismo han sido directamente contrarias al nivel de vida de los trabajadores y sectores populares. Beneficiando a los empresarios importadores, especuladores y grandes capitales. Muchas de estas medidas han sido saludadas con entusiasmo por Fedecamaras y Conindustria, representantes de los patrones ‘opositores’.
También debemos denunciar la criminalización de la protesta obrera y popular, las persecuciones y asesinatos a los luchadores y activistas sindicales, obreros y del movimiento popular. Una muestra muy reciente es la de Sabino, cacique Yupka, asesinado por sicarios hace pocos días.
Por eso llamamos a la reflexión a los luchadores, para que no confiar en los llamados a la unidad que ahora desde el gobierno y también desde la Mesa de Unidad Democrática (MUD) nos hacen al pueblo trabajador. Nos quieren confundir. Es hora de que los trabajadores vayamos por un camino independiente de patrones y militares, de burócratas y corruptos. Es hora de que construyamos nuestra propia herramienta política. Cuando pase este duro momento, comenzarán a discutir como gobernar este país. Los diferentes sectores patronales volverán a las peleas por el reparto de la renta petrolera, fuente de la riqueza nacional, los militares cumplirán la que ha sido su labor de siempre, resguardar el régimen de propiedad privada.
Los trabajadores deberemos intervenir con nuestras propias propuestas, movilizarnos en la defensa de nuestras reivindicaciones como son salario, empleo, derecho a la organización sindical independiente, entre otras, y también en aras de nuestros derechos políticos, es decir: movilizarnos por un gobierno obrero y verdaderamente socialista.
La Unidad Socialista de los Trabajadores siempre ha estado y estará por el apoyo y la participación directa en las luchas que los trabajadores y las masas populares libren en defensa de sus intereses, reivindicamos hoy más que nunca la necesidad de impulsar la movilización de los trabajadores y la necesidad de construir la dirección revolucionaria internacionalista que sea capaz de guiar a la clase obrera hacia la toma del poder.