PST Colombia

Partido Socialista de los Trabajadores

Gobiernos locales: crisis social, violencia y asistencialismo

Comuna 18 de Cali.

El desempleo, la inseguridad, la presencia paramilitar, el déficit de vivienda, crecimiento de los asentamientos de desplazados del campo, el caos en el transporte, los altos costos de los servicios públicos y la precariedad de los servicios de salud y educación son los problemas comunes que tiene la mayoría de las ciudades en Colombia.
Además, en estas ciudades hay una fuerte presencia de familias y carteles que controlan la burocracia y están al servicio de los grandes inversionistas. En los últimos años se ha intentado que los principales centros urbanos cumplan una función dentro de los planes estratégicos de la burguesía en su inserción al TLC, causando grandes estragos sociales.
Se han elegido mandatarios ‘alternativos’ que han adelantado políticas para favorecer a los grandes inversionistas con un discurso de ‘integración’ a través de políticas asistencialistas y de la construcción de algunas obras en sectores marginados.

Cali y Medellín
Sergio Fajardo, Alonso Salazar y Aníbal Gaviria son mostrados como ejemplos de buenos gobiernos en una de las ciudades más violentas y desiguales del continente. En Antioquia, el paramilitarismo ha servido como base de la expansión de los negocios de la ‘burguesía paisa’ manteniendo un fuerte control social sobre los trabajadores y la población.
En el caso de Cali, desde hace más de diez años, cuando se realizaron grandes movilizaciones en contra de la privatización de los servicios públicos, fueron elegidos gobiernos que contuvieron y cooptaron a las organizaciones sociales que se les oponían. En las pasadas elecciones fue elegido por primera vez en muchos años un representante directo del empresariado, Rodrigo Guerrero, en medio de una derrota de los trabajadores y las masas en el Valle del Cauca.

El Caribe Colombiano
En el Caribe Colombiano, Barranquilla sigue siendo administrada por los empresarios, liderados por la Familia Char, con la misma receta de aplicación de los planes de los grandes inversionistas y una política asistencial para contener la crisis social que genera el desempleo. Los Char son presentados como los salvadores de una ciudad que fue pionera en ‘gobiernos alternativos’ como los del Cura Hoyos y el Movimiento Ciudadano, que terminaron en grandes escándalos de corrupción como los del Polo en Bogotá.
En Cartagena, la pasada administración fue un intento de los empresarios – liderados por la Familia Araújo – de tomar el control de la ciudad pero la situación de miseria es tan crónica que fue elegido un periodista con apoyo de una de las familias tradicionales de la región, los García Romero. Los planes para Cartagena siguen siendo atraer a grandes inversionistas del turismo, desplazando a la población de las zonas costeras hacia tugurios al sur de la ciudad.
Los medios han comentado también el triunfo del progresista Marcelo Torres, avalado por los Verdes, en Magangué, el principal centro político de Enilse López ‘La Gata’. Pero este es un triunfo de Santos contra los sectores más uribistas que desde hace tres decenios han expropiado a los campesinos en el Litoral Caribe. Torres es un lugarteniente de la Unidad Nacional que servirá para la llegada de grandes inversionistas de los agronegocios que en últimas serán los grandes beneficiarios de la restitución de tierras en La Mojana y los Montes de María.