La desaparición de los 43 normalistas detona la movilización nacional contra el gobierno
El 26 de septiembre de 2014 en Ayotzinapa, México, policías y enmascarados del grupo Guerreros Unidos atacaron a un grupo de estudiantes normalistas que venían en varios autobuses tras haber participado en protestas contra el gobierno del estado sureño de Guerrero. Como resultado de ello hubo 6 muertos, 25 heridos y 43 desaparecidos.
Desde México se ha denunciado como responsable al mismo Estado, como parte de su estrategia de control y terrorismo para detener la creciente organización y politización estudiantil, sector que viene dando una lucha contra la reforma educativa a las normales del Estado de Guerrero. Esta no se ajusta a las reales necesidades de educación integral y que por el contrario apunta más a la capacitación e instrucción que a la formación, más a las competencias y el individualismo que a la necesidades del pueblo.
En los últimos dos meses se han venido desarrollando una serie de marchas y movilizaciones, no solo en el territorio mexicano sino a escala global, como parte de un movimiento por el derecho a la vida e integridad de los 43 normalistas.
Por parte del Estado Mexicano ha intervenido la Procuraduría General de la República con un papel errático y de desviación de las causas centrales del crimen contra los 43 estudiantes, como se ha visto en diferentes casos de desaparición forzada, se proponen recompensas para justificar una gestión investigativa que no han realizado en profundidad.
Desapariciones como política de Estado
Este crimen ésta enmarcado en una cadena de desapariciones forzadas que se han venido presentando a lo largo y ancho del continente ya sea por causas comunes o por las políticas de represión de los estados capitalistas, en este sentido es menester denunciar la responsabilidad de los aparatos estatales por su acción y omisión, como parte de la reivindicación de los derechos democráticos de opinión, vida e integridad personal, es anteponer la humanidad ante la barbarie capitalista.
La desaparición de los 43 normalistas se da en un contexto en el que desde el 2011 se venía desarrollando la movilización y organización del estudiantado mexicano. Ya en ese año en el Estado de Guerrero se habían reprimido las movilizaciones que exigían mejoras en las condiciones de las escuelas normales y una educación integral que se ajustara a las reales necesidades del campesinado y la región. Se destaca el papel represivo del exgobernador Ángel Aguirre del PRD, el cual lejos de oír el clamor de los estudiantes respondió con violencia, dejando como resultado la muerte de 2 estudiantes.
Como parte del prontuario del Estado Mexicano se señala que este “es responsable de la desaparición de al menos 512 personas entre 1969 y 1985 en Guerrero”1, lo que demuestra que este hecho no es aislado sino que por el contrario es parte de la política de terror del aparato estatal.
Las cifras de desapariciones en México ascienden a 22.322 personas, distribuidos en los estados de Tamaulipas (4.875 casos), Jalisco (2.113), Estado de México, (1.554), Distrito Federal (1.450), Coahuila (1.332), Sinaloa (1.289), Baja California (1.260), Guanajuato (1.207) y Chihuahua (1.127) según los datos reportados por el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED) elaborado desde el año 2011 2.
Narcotráfico: pretexto para la represión
Las fuerzas armadas de México han venido profundizando política de vieja data de subordinación al Pentágono y al Comando Norte de los Estados Unidos, con el pretexto de combatir al narcotráfico. Pero se denuncia por parte de las diferentes organizaciones sociales y políticas que su verdadero objetivo es el control y represión del movimiento obrero, campesino y popular, pues en vez de dirigirse contra las organizaciones narco-paramilitares han generado una fractura soterrada en la organización del movimiento de resistencia.
Es evidente la articulación entre los partidos, líderes políticos y el gobierno regional y central con las organizaciones narco-paramilitares con las cuales se observa en algunas ocasiones una unidad de acción. Habría que indagar si este comportamiento es parte de la asesoría brindada por Oscar Naranjo, general en retiro de la policía de Colombia, quien estuvo brindando sus servicios y conocimientos al Estado mexicano y ahora es parte del equipo asesor de Juan Manuel Santos para el llamado posconflicto.
El régimen mexicano se sustenta en una alianza entre partidos como el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) con vínculos evidentes con el narcotráfico, cuyos líderes políticos mantienen vidas extravagantes y lujosas en un país con altos niveles de pobreza. Ejemplo de ello, son los lujos que ostenta el presidente Eduardo Peña Nieto quien posee con su esposa una casa que de manera ilegal fue negociada con una empresa china, la cual coincidencialmente licitaba la construcción de un tren de alta velocidad con un multimillonario contrato.
El aparato estatal capitalista de México ha venido experimentando desde hace mucho tiempo una erosión progresiva, articulado esto con el regionalismo propio de algunos países latinoamericanos; pero que en el caso del país significa que los poderes de líderes locales se entrelacen con las mafias, la cuales llegan a ser el poder real en algunos de los estados del sur de México. Este fenómeno es conocido por la burguesía y lejos de representar un peligro es parte del negocio que significa la generación de capital vía articulación con el capital mafioso del cual derivan ganancias que circulan posteriormente en el sistema financiero.
Los responsables
Las investigaciones hasta el momento dan como responsables a la policía, quienes entregaron los estudiantes normalistas al grupo narco-paramilitar Guerreros Unidos, pero se sabe además que el Alcalde José Luis Abarca y su esposa María de los Ángeles Pineda fueron los ordenadores de este atroz crimen.
El Estado Mexicano debe responder por el crimen pues no quedan dudas sobre su responsabilidad, como lo manifiesta el titular de la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) Jesús Murillo Karam al decir “no tengo ninguna duda de que allí hubo un homicidio masivo, ¿qué tengo que hacer ante esa certeza? Identificarlos”3, esta es la expresión irónica del procurador general en México.
Movilización nacional y solidaridad internacional
De allí que se gesta un movimiento, a nivel nacional en México, cuyas exigencia es justicia y verdad, al exigirle al Estado que investigue y que aparezcan los 43 estudiantes con vida. Estas movilizaciones han sido de diversos sectores sociales y con acciones directas como la quema la puerta del Palacio de Nacional en la Ciudad de México.
El día 20 de Noviembre se realizó la jornada de acción global por Ayotzinapa con manifestaciones en México en los estados de Guerrero, Sonora, Chiapas, Tamaulipas, Quintana Roo, Yucatán, Morelos y en la Ciudad de México, en la mismas se cuenta con la participación del movimiento estudiantil, los docentes tanto universitarios como de la básica, del movimiento obrero en general. En la capital la marcha fue liderada por los familiares de los 43 normalistas.
A escala global en diferentes lugares como Bolivia, Argentina, Nicaragua, Pais vasco, Londres, Madrid, Alemania, Francia, y en Estados Unidos, en las universidades de Howard, el Massachusetts Institute of Technology (MIT) y Berkeley, etc. Identificando este hecho como un crimen que el movimiento obrero, estudiantil y popular no está dispuesto a que quede en la impunidad.
Un hecho notorio es que este mismo día se realizó una entrega de premios a la que asistía la hijastra de Peña Nieto y en este mismo evento el grupo Calle 13 junto con otros artistas se solidariza con esta causa que adquiere carácter internacional.
Hacemos un llamado apoyar esa lucha democrática, por la aparición de los 43 estudiantes normalistas, para que se investigue a profundidad y se de no solo con los autores materiales sino también con los autores intelectuales. Nos mantenemos en pie, en resistencia a los aparatos legales e ilegales de los estados capitalistas que utilizan la desaparición forzada como instrumento para acallar la voz de los trabajadores y el conjunto de la sociedad.
¡NOS FALTAN 43!!!
¡VIVOS SE LOS LLEVARON: VIVOS LOS QUEREMOS!
¡NOS MANTENEMOS EN PIE !!!
1 Consultado el 20 de Noviembre de 2014: http://internacional.elpais.com/internacional/2014/11/16/actualidad/1416...
2 Consultado el 20 de Noviembre de 2014: http://mexico.cnn.com/nacional/2014/10/20/5-estados-concentran-la-mitad-...
3 Consultado el 20 de Noviembre de 2014: http://www.elheraldo.co/internacional/manifestantes-incendian-puerta-del...