Acto nacional, “Somos todos Pinheirinho”, reúne a 4 mil en São José dos Campos

Ni siquiera el calor abrasador de 35°C ahuyentó a los manifestantes que participaron del Acto Nacional de Solidaridad a Pinheirinho, este jueves 2.
Con mucha disposición, cerca de 4 mil personas cubrieron las calles de São José dos Campos, con sus pancartas, banderas, escudos, carteles y, sobre todo, mucha solidaridad a todos los trabajadores pobres de Pinheirinho, quienes fueron brutalmente desalojados por la acción cobarde del gobierno paulista de Geraldo Alckmin.
 
La protesta, una de las mayores protestas realizadas en la ciudad, contó con un gran refuerzo nacional. Caravanas llegadas de los Estados de Minas Gerais, Paraná, Río de Janeiro y Río Grande del Sur, se juntaron a los moradores de Pinheirinho. También participaron otras innumerables caravanas de activistas de la capital paulistas, Campinas, ciudades de la región del Valle de Paraíba, entre otros municipios del interior del Estado.
 
El acto contó con la participación y apoyo de varias organizaciones del movimiento sindical y popular. Entre ellas, la CSP- Conlutas, MTST, MST, CMP, decenas de sindicatos de varios estados, además de partidos políticos como el PSTU, PSOL, PCB y PT.
 
Una de las presencias destacadas fue la de una columna de activistas del MST, que ofrecieron a los pobladores de Pinheirinho cuatro camiones cargados de provisiones para las familias sin abrigo.
 
Concentrados en la Plaza Afonso Pena, los manifestantes realizaron un acto político antes de dar inicio a la movilización. El primer discurso fue de Guilherme Boulos, del MTST (Movimiento de los Trabajadores Sin Moradia).
 
“Hoy realizamos un acto, una movilización. Mañana vamos a ocupar predios, carreteras. Esa es nuestra única alternativa para enfrentar al capital”, declaró.
 
En la secuencia, siguió el dirigente nacional del MST (Movimiento de los Trabajadores Sin Tierra), Gilmar Mauro quien criticó, de forma contundente, a la justicia, recordando casos donde los ricos fueron rápidamente absueltos por sus crímenes, mientras que los trabajadores pobres sufren con cobardes acciones de desalojo y represión. “¡El poder judicial brasileño es una mierda!”, sentenció Gilmar, arrancando aplausos de la multitud.
 
El dirigente también exigió una solución de parte del gobierno de Dilma. “El gobierno federal tiene que tomar coraje y expropiar el terreno de Pinheirinho. Eso es lo mínimo”, completó.
 
La exigencia al gobierno federal fue repetida enfáticamente por Cosme Vitor, de la CMP (Central de Movimientos Populares). “Dilma, no sirve de nada lamentarse, queremos expropiación”, acusó.
 
Serginho, del MUST, habló en representación de los moradores de Pinheirinho. Emocionado, el activista expresó “orgullo y satisfacción” por la amplia unidad expresada en el acto. “Sólo unidos, los trabajadores, podrán transformar este país”
 
El diputado federal, Chico Alencar (PSOL-RJ), también exigió una acción concreta del gobierno federal y prometió llevar la masacre de Pinheirinho a los trabajos de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados. “La única reparación de la presidencia de la República es la expropiación de Pinheirinho”. Ya el diputado Iván Valente (PSOL-SP), acusó al ejecutivo de omisión en las semanas que precedieron al desalojo.

Por las calles de Sao José, el encuentro de muchas historias
Luego del acto, los manifestantes siguieron en movilización por las calles centrales de São José. Durante la movilización, bajo un sol inclemente, muchas historias sobre los abusos policiales se relataron al reportero. Historias de horror que aún suceden en los alojamientos para los desabrigados.
 
En la noche del 1° de febrero, Valdir Martins, o Marrom, dirigente de Pinheirinho, fue cercado por un grupo de policías militares que trataron de apresarlo. La acción de la PM se dio en el alojamiento Marumbi, uno de los locales hacia donde fueron llevados los moradores después del desalojo. Marrom sólo no fue apresado por los policiales por que los moradores actuaron rápidamente e impidieron la acción de la policía.
 
Un funcionario de la Urban, empresa municipal que realizó el recojo de las pertenencias de los pobladores después del desalojo dijo al reportero que fue obligado a trabajar en la "limpieza" de Pinheirinho. También relató que muchas pertenencias fueron robadas, incluso por policías. “Quien escogía lo que sería llevado o no, en el camino, era un oficial de justicia y no los moradores”, reveló el funcionario, quien prefiere no identificarse. Según él, fueron robados, principalmente, cámaras y electrodomésticos. El, asimismo, reveló que toda la comida que había en las casas, incluso en las heladeras, fue tirada afuera.

Verdaderos bandidos
Después de cuatro horas de caminata, la movilización llegó a su objetivo, la Prefectura de São José, donde se realizó el acto final.
 
Toninho Ferreira, abogado de los pobladores, saludó la amplia solidaridad al pueblo de Pinheirinho. “Es magnífico saber que un trabajador rural tomó parte de su cosecha, para traerla aquí, al pueblo de Pinheirinho”, dijo. También reafirmó la disposición de lucha del movimiento. “Ellos no consiguieron quebrar nuestra espina, el movimiento continua”.
 
Hablando a nombre del PSTU, José María de Almeida, Zé María, provocó aplausos cuando defendió a los pobladores y dirigentes de Pinheirinho, que son víctimas de una fuerte campaña de calumnias en la gran prensa. “El verdadero bandido está ocupando esa prefectura. Es quien masacra al pueblo de Pinheirinho para defender a Naji Nahas”, dijo.
 
También demandó una acción concreta del gobierno sobre la situación de los moradores. “Del gobierno, la gente no quiere sólo apoyo, lo que la gente quiere es solución”, finalizó.
 
La protesta continuó aún por la tarde. Luego del acto, muchos activistas y delegaciones de todo el país visitaron el terreno donde estaba Pinheirinho, arrasado por el PSDB. También visitaron los alojamientos donde están los moradores sin hogar.
 
Fuente: www.pstu.org.br, 2/2/2012
 
Traducción: Laura Sánchez