Verano árabe y fuego griego ¡Que la crisis la paguen los ricos!

La lucha de los pueblos árabes no ha cesado. A pesar de las maniobras con las que se pretende frenar la movilización, como la reforma constitucional en Marruecos, la convocatoria a elecciones en Egipto, o la guerra de desgaste en Libia, los levantamientos continúan. Para algunos la “primavera árabe” ha dado paso a un tórrido verano, como lo demuestra el pueblo sirio que se niega a aceptar los llamados a la conciliación que propone el genocida régimen de El Assad. Pero lo más importante es que el ejemplo de la ocupación masiva de plazas se trasladó al otro lado de Mediterráneo, al continente europeo, donde la burguesía imperialista trata de superar la crisis económica aplicando duros planes de ajuste, aplazando la edad de jubilación, recortando los derechos de salud y tratando de privatizar la educación. Contra un segundo “plan de ajuste estructural” es que se han levantado los guerreros griegos y desde la plaza Syntagma le informan al mundo que no aprueban las decisiones del parlamento de Papandreu y anuncian a los prestamistas que sus capitales corren peligro de perderse si siguen desangrando la economía de Grecia. La burguesía mundial sabe que allí se juega el futuro inmediato de la crisis. El ejemplo griego puede ser repetido en Irlanda, Portugal o España amenazados con medidas similares. La huelga general europea sigue al orden del día para imponer la consigna: ¡Que la crisis la paguen los ricos!
Bogotá, julio 27 de 2011