El gobierno cubano abre créditos para que los pequeños empresarios hagan crecer sus negocios "más allá de los límites de la subsistencia".
El pasado 27 de marzo, en el Diario Gramma, el Vicepresidente del Consejo de Ministros de Cuba, Jorge Murillo, manifestó que “la actualización del modelo económico cubano tiene un carácter estratégico y permanente, centrado en el impulso de las fuerzas productivas. Debemos enfocarnos en los problemas que afectan a la economía real y crear las condiciones para el desarrollo permanente de nuestras fuerzas, a la vez que damos prioridad al sector agropecuario, clave para sustituir importaciones en la esfera de los alimentos”.
¿Cuál es esa actualización? La puesta en marcha de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, aprobados a principios de 2011 en el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba. Los lineamientos implican el despido de medio millón de trabajadores estatales que deben convertirse en ‘emprendedores’, es decir, en pequeños propietarios de sus empresas.
Una semana después, en el mismo diario, aparece en la columna ‘Reflexiones del compañero Fidel’ el titular ‘El mundo maravilloso del capitalismo’ en la que hace un inventario de algunos titulares de prensa en las que se muestran las extravagancias de la burguesía en un mundo en el que la guerra y la miseria hacen parte de la cotidianidad de la mayor parte de la humanidad.
Lo contradictorio es que las medidas del régimen del Partido Comunista Cubano para sacar de la crisis al ‘viejo modelo socialista’ tienden a aplicar un ‘nuevo modelo capitalista’. El año pasado, se crearon 360 mil negocios y la meta para finales de 2012 es que sean 600 mil. Pues la comisión que regula los lineamientos está facultada para modificar o crear nuevas políticas, lo que significa que se podrán ‘liberar’ más oficios privados.
Cuentas claras
Pero no ha sido fácil que la población cubana se ‘adapte’ a este capitalismo a escala, a esta creación de propiedad privada regulada por el PCC. Por ello anunciaron el pasado 2 de abril, la puesta en venta de un software llamado ‘Cuentas claras’ para que los emprendedores cubanos puedan realizar informes de gastos, ingresos y tributos a liquidar, con el fin de que los nuevos negocios cumplan con el recaudo de la Oficina Nacional de Administración Tributaria de la República de Cuba, ONAT.
Esta medida hace parte de un proceso que se inició con la entrega de créditos bancarios tanto a los nuevos propietarios como a quienes se conviertan en contratistas estatales, pues la tercerización laboral ya llegó a Cuba. La garantía de estos créditos serán – como en el ‘maravilloso mundo del capitalismo’ – los salarios y los inmuebles. También se podrán vender viviendas entre particulares sin intervención estatal, al igual que los productores agrícolas podrían vender bienes y servicios a los centros turísticos.
También han iniciado un proceso educativo para los nuevos ‘emprendedores’ cubanos, para que aprendan a administrar sus negocios y sacar beneficios “más allá de los ingresos de subsistencia”.
Acumulación y concentración
Una mirada a la historia del capitalismo, muestra que los propietarios de medios de producción compiten con el fin de aumentar sus ganancias (obtener ingresos más allá de la subsistencia) y en esa competencia algunos propietarios ganan y otros pierden.
Pero, al parecer, el PCC espera que los cubanos y los revolucionarios del mundo crean que se puede detener en Cuba la tendencia del capital a acumularse y a concentrarse. No ocultan sus dirigentes sus simpatías por el ‘modelo’ chino, en el que una dictadura a nombre del comunismo administra los negocios de las grandes corporaciones y la explotación de la clase obrera a nivel mundial.
Ya los cubanos habían abierto su economía en el sector del turismo y recientemente anunciaron la construcción de 25 mil nuevas habitaciones para el 2020, con participación de capital estatal y privado. Para este año las metas son construir 13 nuevos campos de golf y montar parques temáticos. Según el viceministro del sector, Alexis Trujillo: “La cifra de turistas ha venido ascendiendo a ritmo de 10,5 por ciento como promedio anual desde 1990, mientras que en 2011 se reportaron dos millones 700 mil visitantes, equivalente a un aumento del 7,3 por ciento con respecto al año anterior”. También sostuvo que “de las 58 mil habitaciones existentes en el país, seis mil pertenecen a unas 30 empresas mixtas”.
Explotación del hombre por el hombre
Pero el PCC no sólo intenta mostrar que la propiedad privada puede detener su tendencia a la acumulación y a la concentración sino que comprar fuerza de trabajo no es explotación del hombre por el hombre, como lo manifestó Ángel Bueno, Presidente de la Comisión de Política e Ideológica durante el VI Congreso. Pero el viceministro Murillo brinda un parte de tranquilidad respecto a cualquier incongruencia con una constitución que prohíbe la explotación diciendo que es posible que “este y otros asuntos, también impliquen transformaciones en nuestra Constitución, más adelante”.
Murillo, el arquitecto del capitalismo cubano, dice que el nuevo modelo económico no tiene como objetivo el igualitarismo, “sino la igualdad de condiciones y posibilidades para todas las personas”, como las constituciones burguesas en las que todos somos libres e iguales ante la ley.
Es paradójico pero hoy, cuando se levantan pueblos enteros contra las dictaduras y los trabajadores europeos comienzan a movilizarse contra los planes burgueses que intentan hacerlos pagar su crisis, el Partido Comunista Cubano intente solucionar la crisis de la revolución con un modelo de capitalismo a escala.